Una buena porción de queso protege contra la caries y otras enfermedades bucodentales… y no sólo por su contenido en calcio.
Los canarios somos muy queseros y no cabe duda de que nuestros quesos son uno de los fuertes de nuestra gastronomía. Pero además, comerlo puede ser beneficioso para la salud de tus dientes. Esa es la conclusión a la que parece haber llegado un reciente estudio de la Academy of General Dentistry (Chicago) que relaciona el consumo de lácteos (especialmente el queso) con la prevención de las caries y otros problemas de salud dental.
Si bien es cierto que el contenido en calcio y proteínas lo convierten de por sí en un alimento beneficioso para el buen estado de nuestros huesos y dientes, en este caso la clave parece estar en las propiedades del queso como estabilizador del pH de nuestra boca. Un pH ácido (por debajo del 5,5) es el entorno perfecto para que se produzcan problemas como la erosión del esmalte dental o las caries, por lo que lo ideal es evitar ese estado el mayor tiempo posible. Es natural que al ingerir alimentos o bebidas nuestra saliva tienda a bajar a niveles más ácidos de lo habitual, para finalmente normalizarse al cabo de un rato. La causa de que el queso contribuya a acelerar esta estabilización del pH parece estar relacionado con el aumento de salivación que produce su ingesta, ya que la saliva es el mecanismo que nuestra boca utiliza de manera natural para este fin.
Aunque está de más decir que comer queso no es suficiente como para sustituir tus hábitos de higiene bucodental habituales, puede que terminar una comida con un pedazo de queso o dejar la tapa de queso para el final ayude a dejar tu dentadura menos expuesta durante ese intervalo entre la comida y el cepillado.
Y si tienes cualquier duda, en Clinica Dental San Gregorio en Telde estaremos encantados de ayudarte a despejarla.